"Shekhinah"

Es la manifestación física de la presencia de Dios en medio de su pueblo - IGLESIA CRISTIANA NO DIEZMADORA

Inicio > Feeds RSS

Feeds RSS

Todos los artículos

https://shekhinah777.webnode.com.co/rss/all.xml

Novedades

https://shekhinah777.webnode.com.co/rss/novedades.xml

Blog

https://shekhinah777.webnode.com.co/rss/blog.xml
  • Inicio
  • Nosotros
  • Novedades
  • Fotogalería
  • Blog
  • Preguntas y respuestas
  • Contáctanos

Buscar en el sitio

Contacto

Shekhinah777

shekhinah777@hotmail.com

 

Y Yahvé iba delante de ellos de día en una columna de nube, para guiarlos por el camino; y de noche en una columna de fuego para alumbrarles; á fin de que anduviesen de día y de noche. (Exodo 13:21)
Entonces Moisés subió al monte, y una nube cubrió el monte. Y la gloria de Jehová reposó sobre el monte Sinaí, y la nube lo cubrió por seis días: y al séptimo día llamó á Moisés de en medio de la nube. Y el parecer de la gloria de Jehová era como un fuego abrasador en la cumbre del monte, á los ojos de los hijos de Israel. (Exodo 24:15-17)
 
 

 

La palabra “diezmo” significa literalmente “un décimo” y es comúnmente usada para referirse a dar el diez por ciento del ingreso a Dios. Sin embargo, desde el comienzo, debe hacerse notar que en ningún sitio fue el dinero diezmado. El diezmo en el Antiguo Testamento siempre se refería al producto de la tierra y de las crías. Algunos podrían responder que este es el caso porque la gente vivía en una sociedad agrícola. Aunque esto es verdad, sin embargo, “el dinero” es mencionado, al menos treinta veces en el libro de Génesis solamente (Gen. 17: 12, 13, 23, 27; 31:15; 33:19; etc.). Por lo tanto, antes que el diezmar se mencionara en la ley de Moisés (Levítico. 27:30), ya se había mencionado el dinero cerca de cuarenta veces. ¡La última referencia al dinero antes de mencionar el acto de diezmar en la ley de Moisés provee incluso reglas para un antiguo sistema bancario (Levítico 25:37)!

Ambos Testamentos ven los diezmos en el marco de referencia del acto de dar y la alabanza. Antes de dar en la ley de Moisés, diezmar no era algo sistemático, una práctica continua u ocasional, incluso excepcional, forma de dar (Génesis 14:20; comparar con Hebreos 7:4; Génesis 28:22). La ley de Moisés incluye estipulaciones acerca de los diezmos (Levítico 27:30-33; Números 18:21; Deuteronomio 14:22-29), los levitas, los festivales y los pobres (o bienestar welfare). Al sumarlos todos, el diezmo anual de los israelitas sobrepasaba el diez por ciento de su ingreso anual. De las siete referencias al diezmo en los libros históricos y proféticos del Antiguo Testamento, la más importante está en Malaquías 3:8 al 12 (comparar con 2do de Crónicas 31:5-6, 12; Nehemías 10:38–39; 12:44–47; 13:5, 12; Amós 4:4), donde se le dice a la gente que traigan sus “diezmos y ofrendas” (levíticos) al “almacén” o alfolí de Dios y se les promete bendiciones agrícolas a aquellos que cumplan.

Debe notarse que en Malaquías, el retener los diezmos era una señal de un patrón extenso de desobediencia. El diezmo mencionado por el profeta es el diezmo levítico (Números 18:21). Las ofrendas a las cuales se hace referencia es hecha era una fuente principal de ingresos de los sacerdotes y era una ofrenda requerida (no era voluntaria). La Invitación a probar a Dios está limitada al contexto de Malaquías 3 y no debe ser universalizada. Por esta razón, la recompensa agrícola prometida no se puede continuar a la gente de hoy día. Más aún, si este pasaje fuera aplicado consistentemente hoy, las ofrendas, las que quienes abogan por diezmar se refieren a la porción en que se da por libre voluntad de dar que ocurre después que uno ha diezmado, no son por voluntad propia, sino que son requeridas tal y como lo son los diezmos. Por lo tanto, si alguien debiera dar solamente el 10% (no que los judíos dieran solamente diez por ciento), esta persona aún estaría en pecado por robar las “ofrendas”de Dios.

Las referencias a diezmar en el Nuevo Testamento están limitadas a tres pasajes. En Mateo 23:23, el diezmo del Antiguo Testamento requerido es sobreentendido por la audiencia de Jesús. Los escribas y fariseos están escoriados por priorizar la minuciosidad de la ley por encima de asuntos más relevantes. Jesús no estaba hablando a los miembros de una iglesia, sino a judíos que aún estaban bajo el Antiguo Pacto y por lo tanto, obligados a dar. De la misma manera, Jesús en Lucas 18:9-14 denuncia el orgullo religioso inapropiado basándose en el solo cumplimiento de la ley. Finalmente, Hebreos 7, explica la entrega de Abraham de los diezmos a Mequisedec en el contexto de la supremacía del sacerdocio de Melquisedec con respecto al sacerdocio levítico. Ninguno de estos pasajes tiene el diezmar como tema principal, y ninguno ordena diezmar para la nueva era del pacto. El caso de diezmar basado en un sistema teológico mayor o sus consideraciones pragmáticas caen en que, al igual que la circuncisión, Jesús cumplió los requerimientos de diezmar y los reemplazó con una orden para los creyentes del Nuevo Testamento de entregarse a sí mismos a Dios y dar abundantemente de sus recursos (1ra Corintios. 9:1–23; 16:1–4; 2da Corintios. 8–9; Filipenses. 4:15–17).

 

 


© 2012 Todos los derechos reservados.
Crea una página web gratisWebnode
Inicio Mapa del sitio RSS Imprimir
 
¿Te gusta esta página web?
¡Crea tu propia web gratis en 5 minutos!
¡Pruébalo!